Ya se acerca el día de la elección y recuerdas con satisfacción todos los votos que lograste conquistar. Pero el trabajo no terminó ahí ¡ahora toca defender cada voto!
Aquí entran las/os fiscales o apoderados/as, que no pueden faltar en ningún centro de votación. Ellos/as son los representantes de las agrupaciones políticas (partidos o frentes que poseen una lista electoral) al momento de la elección. Su función es la de fiscalizar las operaciones del acto electoral y formalizar los reclamos que correspondan por irregularidades en el desarrollo de los comicios.
Aquí van algunas cuestiones relevantes para que tengas en cuenta:
¿Cuál es el rol de los/as apoderados/as?
El rol del apoderado al momento de la elección consiste en:
- Observar el proceso electoral, el accionar de las autoridades de mesa y de los votantes;
- Defender y resguardar los votos válidos de la lista que representa;
- Elevar los reclamos correspondientes a las autoridades de mesa en caso de existir alguna irregularidad en el proceso;
- Reponer las boletas en caso de existir una faltante, apelando siempre al cumplimiento de la normativa institucional y evitando interferir en las decisiones del presidente de mesa.
- Durante el proceso electoral deberán observar, en sus propias copias de padrones, si los ciudadanos efectivamente votan en esa mesa.
- Y al culminar el proceso electoral, también deberán completar las planillas otorgadas por las autoridades partidarias, reflejando los resultados electorales de cada mesa.
¿Cuántos apoderados debes tener en cada local de votación? La cantidad óptima consiste en un apoderado/a por mesa de votación, y un apoderado/a encargado/a de la coordinación general.
Coordinación de los apoderados
Es necesario que un apoderado/a por local de votación tenga a su cargo la coordinación general de los demás apoderados reunidos en un mismo local de votación. ¿Por qué? Porque alguien debe tener una visión general de lo que ocurre y preocuparse de:
- Fiscalizar el proceso general de la elección (no solo lo que sucede en cada mesa, sino todo lo que ocurre en la institución/local de votación).
- Acompañar a los apoderados de mesa en caso de existir algún problema puntual.
- Centralizar las planillas de datos de cada mesa, para luego entregarlas a la autoridad partidaria correspondiente.
En algunos locales de votación pueden existir “mesas testigo”, que son aquellas cuyos resultados permiten construir información sobre el resultado general de las elecciones. Esta información es de consumo interno de cada organización política. En caso de existir la “mesa testigo”, el/la apoderado/a de esa mesa (o el/la apoderado/a general del local de votación) tendrá la tarea de enviar los resultados rápidamente a las autoridades partidarias (enviando alguna foto de la planilla completa).
Claves para una fiscalización efectiva
Para lograr una buena organización y coordinación de los apoderados, y conseguir así una fiscalización efectiva, ten en cuenta lo siguiente:
Conocimiento previo
Cada distrito o sección electoral contará con diversos locales de votación. A su vez, cada local de votación cuenta con diferentes mesas de votación. Los apoderados generales deben tener conocimiento y experiencia previa en la fiscalización de una mesa. Es importante que sean personas capacitadas y con trayectoria. También es importante que puedan conocer a los demás apoderados de un mismo local de votación con antelación, de manera que puedan sentirse referenciados y coincidir en una misma lógica de trabajo.
Organización y resolución de problemas
Los apoderados generales serán los encargados de la organización de sus apoderados voluntarios. Deberán responder ante cualquier problema que pueda surgir. Es posible que en un mismo día los apoderados de mesa quieran o tengan que retirarse de sus funciones por alguna cuestión prevista. Por ejemplo, puede suceder que un voluntario manifieste que no podrá sostener su tarea durante todo el proceso electoral, y que solo podrá fiscalizar por la mañana, y en ese caso se deberá encontrar a otro voluntario que pueda hacerlo por el turno tarde. También puede ocurrir que acontezca un caso excepcional, en el que un apoderado de mesa deba retirarse de su función por alguna emergencia. En este caso, los apoderados generales deberán poder sustituir a estos en sus funciones.
Cercanía con su mesa y logística
La disposición de los apoderados el día de la elección debe ser cercana a la mesa de votación que le ha sido asignada previamente. Cada cierto tiempo (por lo general acordado con otros fiscales y la autoridad de mesa) deberá ingresar al cuarto oscuro a revisar la disposición de las boletas, reponerlas o detectar cualquier irregularidad.
Puede suceder que un apoderado (o más de uno) no vote en el local de votación en el cual se encuentra ejerciendo su tarea. También es importante aquí contar con una logística y movilidad que garantice que el apoderado pueda ir a votar y ser reemplazado en su tarea por el apoderado general. Y en caso de haber más de un apoderado que requiera votar en otro local, es importante que lo hagan en distintos momentos, para que nunca quede una mesa sin fiscalizar.
Alimentación
El día de la elección también es necesario contemplar la comida y los víveres necesarios para los apoderados. Un apoderado con energía será más eficaz que uno con hambre y sueño. Para lograr una distribución de los insumos será importante contar con algunos voluntarios encargados de esta logística.
Voluntarios con compromiso y capacitación
Las/os fiscales o apoderadas/os son voluntarias y voluntarios que serán tus ojos en los locales de votación: se preocuparán de que todo vaya según las reglas y, en el momento de contar los votos ¡deberán defender los que te corresponden a tu candidatura o a tu lista!
Por eso, es importante que se encuentren comprometidos con el proyecto político de la agrupación que representas tú como candidata, o tu lista. Esto es así ya que, de lo contrario, la tarea no será efectiva.
Es por eso que se requiere de una reunión previa con las y los voluntarios. En esta reunión se deberán otorgar las herramientas técnicas necesarias para afrontar el proceso de fiscalización y transmitir el compromiso para que cada fiscal comprenda que su rol es fundamental para que el proyecto político triunfe y para que realmente sea la voluntad de la ciudadanía la que llegue a las urnas.
Capacitación
Las herramientas para capacitar a las voluntarias/os que ejercerán esta labor pueden ser varias: un proyector o computadora, una gigantografía o boleta impresa a mayor escala, una boleta real. Todos constituyen insumos para educar a las y los voluntarios en el acto de fiscalizar.
Se debe poner énfasis en:
- Saber cuándo una boleta es válida y cuándo no;
- De qué forma de elevar un reclamo;
- La importancia de sostener el vínculo de respeto con las autoridades y los demás fiscales de las otras agrupaciones (de manera que el proceso sea más ameno);
- Qué maniobras ilegales pueden darse para contaminar el proceso electoral (robo de boletas, cambio en la disposición del orden de las boletas, compra de votos, etc.).