Siempre debemos tener en claro que estamos trabajando en una campaña política y que nuestro objetivo no es sólo aumentar nuestro número de seguidores, sino conseguir los votos necesarios para ser electas. Te presentamos el punto clave número 5.
Likes e interacciones en redes sociales no necesariamente significan votos y por eso es importante que tengamos el control estratégico del embudo de conversión de la campaña.
El embudo de conversión es una herramienta que te permite visualizar a las personas que te apoyan y categorizarlas de las más alejadas a las más cercanas. Con eso, luego puedes crear estrategias para conseguir que las personas que recién se interesan en tu campaña se conviertan en ¡fieles partidarias!
Para llevar a alguien de un nivel de involucramiento con tu campaña al siguiente, es necesario que le hagas una invitación clara para involucrarse más.
Por ejemplo, a las personas que han comentado o interactuado bastante en tus redes, les puedes invitar a entregar sus datos enviándoles un formulario. Si quieren hacer más, te toca invitarlas a ser voluntarias digitales. A las voluntarias digitales más presentes, puedes llamarlas a ser voluntarias de la campaña y asignarles tareas… ¡y así!